Vendido Pintura al óleo sobre tabla de 68 x 73 cm sin marco y de 84 x 89 cm con marco, que representa una exuberante y alegre fiesta campesina de un pintor que se acerca, en estilo y tipo de representación, a quien fue sin duda su mentor, D. Teniers el Joven (Amberes 1610 - Bruselas 1690). Esta amable escena de género, que representa una gran fiesta campesina, celebra su amado pueblo; la fiesta es muy animada y despreocupada, como podemos observar en una serie de personajes que tienen movimientos libertinos y que están absolutamente decididos a celebrar de forma desenfrenada. Como se ha dicho, el autor de esta pintura, inspirándose en el estilo de Teniers, especialista en estos temas centrados principalmente en la vida y las costumbres de los campesinos, nos ofrece una muestra significativa con su calibrada recopilación inventiva de este grupo campesino, en el que se reúnen al menos tres generaciones en fiesta: desde los personajes principales sentados a la mesa dedicados a brindar en sus poses vulgares y divertidas con vasos en la mano y jarra en el suelo, hasta el hombre que ayuda a una mujer a levantarse hasta otros grupos de personas dedicadas a la alegría y a la confusión con toda una serie de utensilios y objetos presentados aquí y allá de forma casi descuidada por nuestro autor. Los trajes de nuestros protagonistas están descritos cuidadosamente con abundancia de detalles y con una estrecha relación realista, como representa habitualmente Teniers que, con su obra centrada en el mundo rural (nótese a la derecha el fondo paisajístico digno de mención), nos ha ofrecido una variada ejemplificación que constituye una realista documentación. Al mismo tiempo, el autor ha sabido conferir a estas reconstrucciones, en las que el paisaje juega siempre un papel de contorno o de fondo, una sabrosa agradabilidad de inventiva y de maquetación, acompañada de un tejido pictórico de refinado nivel, jugado sobre cromatismos y paisajes claroscuros con efectos próximos al pastel; peculiaridad que se ha externado positivamente en este cuadro que puede considerarse tranquilamente una jugosa anticipación de la cultura figurativa del siglo XVIII. La obra, como cada uno de nuestros objetos, se vende acompañada de un certificado fotográfico FIMA de autenticidad y lícita procedencia; este documento identifica el objeto aportando un valor añadido al artículo. Nos ocupamos y organizamos personalmente el embalaje y el envío de las obras de arte con seguro en todo el mundo.